Cómo detectar el alzhéimer es una competencia y conocimiento en una sociedad demográficamente envejecida donde esta patología es bastante frecuente entre personas de avanzada edad. El alzhéimer es a día de hoy la más importante y extendida de las demencias seniles, que son dolencias caracterizadas por las pérdidas de memoria y de las habilidades cognitivas y las alteraciones de la personalidad y la conducta. Dentro de las demencias, hay otras modalidades, como la vascular, la demencia con cuerpos de Lewy, o la frontotemporal.
Por estas razones, y para contribuir al mayor conocimiento y sensibilización de la población con esta enfermedad neurodegenerativa que es el alzhéimer, se están llevando a cabo múltiples actividades por parte de las asociaciones de enfermos:
- Campañas periódicas de sensibilización, y de prevención de esta patología.
- Creación de redes a nivel local para poder culminar estos objetivos.
- Diseñar, planificar, y llevar a la práctica, medidas que impulsen labores en Atención Primaria para este tipo de situaciones.
- Diseñar, y llevar a la práctica, medidas que permitan la comunicación con el paciente.
Como podemos apreciar, dentro de este compromiso por sensibilizar e informar a la población e implicar a los actores sociales (entre ellos, las instituciones sanitarias públicas) desempeña un papel harto importante la prevención de la enfermedad. Para cumplir con el propósito preventivo, es fundamental la detección de las señales y síntomas del alzhéimer. Y, cuanto más temprana y precoz sea esa detección, mucho mejor.
El test del Alzhéimer: las 10 señales de la Alzheimer’s Association
Para saber cómo detectar el alzhéimer y facilitar esta tarea, la Alzheimer’s Association ha esquematizado la detección de esta patología neurodegenerativa en 10 señales básicas de alerta de los síntomas tempranos:
- Pérdidas de memoria que afectan a la vida cotidiana, a la hora de recordar nombres de cosas y personas que conocemos. En la fase temprana del alzhéimer, estas pérdidas afectan sobre todo a la memoria a corto plazo y a cosas y personas que conocemos poco y desde hace poco tiempo, pero igualmente afecta al desenvolvimiento cotidiano.
- Se experimentan mayores dificultades de lo usual a la hora de planificar actividades y resolver problemas del día a día.
- Las tareas más habituales resultan difíciles de completar, cuando antes no era así.
- Se comienzan a experimentar problemas de desorientación espacio-temporal. De pronto, la persona afectada encuentra difícil dónde está, en qué fechas y a qué horas, etc.
- Resulta más difícil identificar imágenes visuales y relaciones espaciales, en lo que es un problema de pérdida de facultades para las asociaciones mentales.
- Problemas para encontrar las palabras adecuadas en la expresión oral o escrita, cuando antes había mayor fluidez para ello.
- Se colocan los objetos fuera del lugar que habitualmente les corresponde, y además la persona afectada encuentra difícil volver sobre los propios pasos que acaba de dar.
- Se pierde la capacidad de buen juicio y de meditar las decisiones con serenidad, o bien queda mermada.
- La persona afectada tiende a aislarse del entorno social, y asimismo de lo que son sus actividades laborales y profesionales.
- Alteraciones en la personalidad y repentinos cambios de humor, a veces con una irritabilidad excesiva y sin causa aparente.
Los síntomas del alzhéimer
Los síntomas de esta enfermedad quedan de por sí esbozados por este cuadro temprano que permite la detección precoz. Esta patología cerebral incluye pérdida de memoria a corto, medio y largo plazo y de la memoria sensorial, así como alteraciones del humor y la personalidad, y graves problemas de orientación, pérdida de capacidad de decisión y planificación, incapacidad de organizar y realizar las tareas cotidianas, incluidas las más rutinarias y normales…
En los primeros estadios de la enfermedad existen cambios en la memoria que pueden llegar a dificultar la vida diaria siendo una de las señas más comunes olvidar la información reciente. Se pierde información como olvidar un evento, no apagar un fuego a tiempo, no saber cómo funciona un dispositivo electrónico…
La dificultad para planificar o resolver problemas es otra de las señales inequívocas de que algo está pasando. Algunas personas experimentan cambios en su habilidad de desarrollar y seguir un plan o trabajar con números, por ejemplo, seguir unas pautas de una receta, hacer cuentas más o menos fáciles o les cuesta realizar cosas que antes eran tareas normales del día a día.
En casa o en el trabajo, comienzan a aparecer problemas y dificultades para realizar cosas con normalidad, incluso en el tiempo libre. Pueden tener dificultad en llegar al lugar de trabajo, realizar la lista de la compra o recordar cómo se práctica un juego o deporte conocido. La desorientación de tiempo de lugar suele ser muy común en las personas que empiezan a acusar la aparición del alzhéimer en sus vidas, olvidándose de fechas, estaciones y el paso del tiempo en general.
Hablar o escribir, seguir una conversación, encontrar la palabra adecuada para llamar a un objeto, pueden ser inevitables cuando los síntomas empiezan aparecer y avanzan.
Acusan cambios en la personalidad y el humor, mostrándose más agresivas, deprimidas, tímidas…
Causas de la aparición del alzhéimer
Esta dolencia se debe a la multiplicación excesiva y anormal de proteínas en torno a las neuronas, y también entre ellas y en su interior, de tal manera que su actividad va quedando paulatinamente bloqueada, disminuida y destruida. Se ha relacionado que una buena alimentación, la actividad física, una vida social activa y las actividades cognitivas que estimulan la memoria, ayudan a las personas a mantenerse saludables a medida que envejecen. Estos factores también podrían ayudar a reducir el riesgo de deterioro cognitivo que provoca la enfermedad.
Si bien es cierto que el factor de riesgo conocido más importante para el Alzheimer es la edad. La cantidad de personas con la enfermedad se duplica cada 5 años después de los 65 años. Aproximadamente un tercio de todas las personas mayores de 85 años podría tener la enfermedad de Alzheimer. La mayoría de las personas con Alzheimer lo tienen de tipo tardío, es decir, aquel que aparece entorno a los 65 años.
Es necesario, pues, contar con las herramientas adecuadas para detectar el alzhéimer y combatir esta enfermedad cuanto antes, y así ayudar a las personas que lo necesitan y a nuestros seres queridos. En mSoluciona Torrelavega, contamos con los profesionales cualificados para cuidar a personas enfermas que sufran esta u otra enfermedad.
Cómo diagnosticar y evaluar la enfermedad
En la actualidad, existen varias pruebas para determinar su una persona padece Alzheimer. El diagnóstico o exámen clínico determina la presencia de ciertos síntomas y descarta otras causas. Estas pruebas médicas incluyen exámenes del estado mental del paciente, su estado físico y neurológico, pruebas de sangre y diagnóstico por imágenes del cerebro, además del historial médico completo del paciente.
– Mediante la exploracón tomográfica computarizada (TC), los especialistas buscan y descartan las otras causas de demencia, tumores cerebrales, hematomas o un accidente cerebrovascular. Se trata de analizar con un equipode rayos x especial con computadoras sofisticadas que producen imágenes o fotos del interior del cuerpo.
– Por otro lado, tenemos la toma de imágenes mediante resonancia magnética (RMN) que utiliza un potente campo magnético para tomar imágenes detalladas de los órganos y tejidos del cuerpo. La resonancia magnética puede detectar anomalías cerebrales asociadas con el deterioro cognitivo leve (DCL) y se puede utilizar para predecir pacientes con deterioro cognitivo leve que podrían eventualmente desarrollar la enfermedad de Alzheimer.
– También destacamos la exploración por tomografía PET y PET/CTde la cabeza, es un examen de diagnóstico que utiliza pequeñas cantidades de material radiactivo (llamado radiosonda) para diagnosticar y determinar la gravedad de una variedad de enfermedades.
